
Esta canción fue compuesta por uno de los más grandes compositores de Brasil, Tony Ricardo. Su historia ha sido marcada por la fe y la dedicación al servicio de Dios, incluso después de ser diagnosticado con cáncer en 2007. “La Palabra de Dios y la certeza de su presencia es lo que no permite que la llama de la fe se apague y que la alegría desvanezca”, aseguró Tony Ricardo.
“La canción nace desde la perspectiva humana, en la que nuestro vocabulario es limitado al tratar de describir la esencia de quién es Jesús, lo que hizo y el precio que pagó por nosotros y nuestra redención. Esta canción nos invita a reconocerlo como el Cordero de Dios, quien quita el pecado del mundo, el León inmejorable, el Salvador, el Rey de Reyes y Señor de Señores… ¡no existe otro!”, contó el compositor.
A la hora de la composición, Tony Ricardo se encontraba en un momento de reflexión y oración, cuando empezaron a venir las primeras frases y la melodía. Esta letra fue compuesta en primera persona, como si Jesús comenzara declarando: “Por encima de mí, nadie un paso dio, quien el mundo olvidó. Era como si yo escuchará al Señor decirme esto a mí”, dijo Tony Ricardo.
“Este tema es uno de los más impactantes que he tenido la oportunidad de interpretar. Uno en el que el reto vocal queda aún lado cuando comienzas a percibir en tu espíritu que a Dios le agrada en gran manera lo que estas cantando y lo que estas declarando. En cierta forma, la exaltación a Dios de esta canción se vuelve tan intensa que tu vida es sobre acogida por su presencia y su poder. No existe forma en la que una vida no pueda ser estremecida al escuchar este majestuoso tema, algo sobrenatural sucede cuando adoras, exaltas y rindes honor al eterno Dios”, narró Sheila.
BY: EnlaceMusical